La prueba del guerrero

Recibo correos de muchas personas que están atravesando ciclos intensos de la energía Kundalini. En estos instantes puedo reafirmaros que no se trata de ninguna auto sugestión de la mente, pues el proceso que atravieso, en estos instantes, tanto interior, como exterior(físico),  es lo suficientemente duro como para sentir la importancia de compartirlo. Lo peor de esta vivencia, para la inmensa mayoría de seres humanos, es la soledad que la acompaña, debido a la incomprensión de amigos y familiares. Debéis tener muy en cuenta que la mente aprovechará vuestra fragilidad sicológica y física -si os acontece alguna enfermedad o dolencia, sea derivada de la energía o no- para introduciros dudas, muchas dudas y junto con las dudas, miedo, mucho miedo a algo que es desconocido, pero no por ello maligno. Veo en mi mismo las trampas que me tiende el "yo". Cuando las identifico, las miro bien, porque de este modo puedo penetrar en los rincones más ocultos de la mente, con el fin de conocerla afondo, y así conocerme a mi mismo en profundidad. Podría tomarme este periodo como algo negativo -seguramente es lo más cómodo y habitual-, pero también puedo tomármelo como un reto que me envía lo sagrado, para probarme, como un crisol templado al fuego.


Es la prueba del guerrero, un guerrero que lucha, a veces contra enemigos invisibles, pero no por ello los debe subestimar. Y uno mismo es su por enemigo. Uno mismo decide si se hunde o si busca esa luz en la oscuridad del océano, que lo llevará a la superficie. Y en la superficie está la Vida, llena de misterios por descubrir, con su inmensa belleza, siempre entregando amor tan generosamente, que ¿cómo no corresponderla? Seguid adelante, aún así vislumbréis un tenue hilo de luz. Con eso es suficiente para continuar, porque, os puedo asegurar que, si vais de corazón, recibiréis la bienaventuranza de la energía Kundalini.