Las configuraciones ocultas del "yo"

El sonido del riachuelo, el verde de los árboles, el frescor de la sombra...formar parte de todo ello es un gozo inexplicable. La totalidad del ser vibrando y valorando la vida. Penetraba el fuego energético y encontraba respuestas a los interrogante nuevos y desconocidos. Voy andando junto a Lucía; me hace reír con su insistencia de hacerme fotos y grabarme... Todo está ocurriendo en este instante. Sigo investigando para encontrar los pasajes ocultos del subconsciente.  Por lo tanto, no puedo ni debo evitar los momentos de soledad para poder entrar en las profundidades más peligrosas del subconsciente (del "yo"). La Energía fluye por la sangre, pero el "yo" también fluye por la sangre. La Energía tiene que seguir al "yo", porque ella sabe que el "yo" busca el lugar más débil de uno, sea en lo sicológico, en lo físico, en lo emocional, en lo espiritual. Cuando la Energía  encuentra al "yo" destruyendo, entonces, la Energía actúa; el combate, aveces, es intenso, y otras es más moderado. Todo depende del lugar donde se ha introducido el "yo". En este aspecto debo señalar que es de vital importancia la actitud que mantengamos, porque la Energía también necesita de la colaboración que le ofrezcamos, y la mejor colaboración que le podemos ofrecer es la fe.
Esta noche el proceso está siendo intenso, conjuntamente con un fuerte dolor abdominal. Finalmente, para lograr calmar un poco el dolor he puesto en marcha la concentración, dirigida al abdomen. Me concentro en un punto concreto del dolor, lo siento completamente, me meto de lleno en este punto del cuerpo. Lo mejor es estar sólo en estos momentos, aunque sientas la tentación de que alguien te acompañe. Bien, lo siguiente que ha ocurrido es que, después de aproximadamente una hora, me he despertado en  posición "fetal". El dolor se había calmado, sentía tranquilidad; la inquietud que me desbordó hacía un rato, se había desvanecido. Soy consciente de que la alimentación, en momentos de vivencias con la Energía, son muy importantes, porque todo el sistema se encuentra en una sensibilidad extrema, y la cena de esta noche no fue la más adecuada. Como sentía, todavía, algo de pesadez y que mi cuerpo no era capaz de evacuar por sí solo los alimentos digeridos, he recurrido a una limpieza intestinal. He introducido por el ano, con ayuda del dedo, un paño de algodón suave, bien empapado de agua caliente, hasta que ha empezado la defecación, y así he repetido la operación hasta quedar  vacío.
Los síntomas de la Energía son muy extraños, porque el cuerpo entra en una fase de máxima sensibilidad (como os comentaba anteriormente) y las agresiones externas influyen sobre manera. Por esta razón, debemos buscar lugares retirados, tranquilos. Y lo más difícil es que debemos  conseguir concentrarnos para aprender a tranquilizarnos, por nosotros mismos, sin necesidad de distracciones externas, de sustancias relajantes, ni otro tipo de actividad intelectual, física o mental. Somos nosotros frente a nosotros mismos, viéndonos, sintiéndonos...tan cerca, que no hay posible escape.

Tened presente que no debemos forzar ni buscar cómo despertar la corriente de la Energía Kundalini. La fortaleza del espíritu y del cuerpo tienen que mantenerse en una total conexión, para que la mente no nos confunda.
Hasta otro instante.
Continuo con vostros en este viaje.